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La Economía Popular y Solidaria: Una apuesta por el equilibrio entre cuidado del planeta y la salud pública

En el año 1948, la Asamblea Mundial de la Salud proclamó el 7 de abril como Día Mundial de la Salud. La fecha fue escogida en conmemoración a la fundación de la Organización Mundial de la Salud (OMS), así como por la necesidad de crear conciencia sobre las enfermedades y crear buenos hábitos en las personas, promoviendo el consumo de alimentos sanos, al tiempo que se cumplan los criterios de promoción de la salud en todas sus etapas.

Para este año, la OMS ha elegido el lema “Nuestro planeta, nuestra salud” como una forma de incentivar a la comunidad a compartir sus experiencias sobre las medidas para proteger el planeta y salvaguardar la salud pública. Por ello, el Instituto Nacional de Economía Popular y Solidaria (IEPS) se suma a esta gran iniciativa,  mediante el apoyo para la incorporación de buenas prácticas de responsabilidad social y de cuidado del medio ambiente, especialmente, en los sectores agrícolas y agropecuarios de la Economía Popular y Solidaria (EPS).

Las actividades económicas de las organizaciones de la EPS, orientadas bajo el criterio de buenas prácticas  en estos sectores, como son: tratamiento, almacenamiento y acondicionamiento de las cosechas, la avicultura, la cría porcina, la ganadería, las tareas domésticas, entre otras, ubica la producción natural y orgánica de alimentos como un aspecto fundamental para contribuir a la buena salud de la población.

En nuestro país existen más de 16 mil organizaciones de la EPS, de las cuales, alrededor de 3700 pertenecen al sector agropecuario y  cerca de mil al sector agrícola, las cuales, continúan desarrollándose, fortaleciendo su procesos y generando productos de calidad; convirtiéndose en una potencial alternativa de consumo y cambio de la matriz productiva por sus prácticas amigables con el medio ambiente, sin dejar de lado el bienestar común y la equidad.

Por todo esto, el IEPS junto al Gobierno del Encuentro continuará con el compromiso de incentivar en los actores y organizaciones de la EPS la práctica de principios éticos y responsables en sus actividades productivas; estableciendo la relación entre salud pública y manejo  adecuado de los recursos naturales como primordial para garantizar una vida plena y digna para toda la ciudadanía.